El Bosque Deinger

-Puedes decir éso- afirmé con una sonrisilla, revelando que realmente tenía hasta el más minúsculo detalle planeado. Y lo había elaborado a una velocidad sorprendente, pero prefería pensar en éso que ocupar mi mente con cosas de menos importancia que aquello. -Y no, no te diré nada. Quiero que sea sorpresa- bromeé, pero la mera verdad era que no le mencionaría ni mu del próximo lugar que visitáramos. Iba cavilando detalles mientras noté que el sendero se iba desvaneciendo lentamente. De ahí en adelante, ya no conocía nada más del bosque, por lo que le decidí consultarle primero el seguir adelante o no. -Ya no conozco aquí, ¿quieres continuar o vamos al próximo lugar?

Sonreí, pero no dije nada. Me limité a seguir el camino, con paso tranquilo, siempre a la par de Tornesch, cuidando su flanco derecho. No pude evitar reírme levemente ante lo de la sorpresa. - Bien, tienes razón. Será mejor si es una sorpresa -aseguré, asintiendo con mi cabeza, pues de hecho si me llegaba a comentar algo gran parte de la emoción del momento desaparecería como por arte de magia. La idea de cuál sería el próximo lugar surcaba mi mente continuamente, planteándome varias opciones, pero sin saber cuál escoger. No me quedaba otra que resignarme a esperar hasta que finalmente él me guiara hacia allí. De pronto, el sendero terminó, perdiéndose entre la hierba y los arbustos. Retrocedí unos pasos, negando con la cabeza- vamos al próximo lugar, no me arriesgaré a perdernos -bromee.

-Perfecto, entonces- di media vuelta, dispuesto a recorrer de nuevo todo el trayecto que había recorrido junto con Shawna. -De seguro ni sabrás a dónde vamos, ¿eh?- solté un relincho agudo y emprendí la marcha, encabezando yo el camino. Pensaba ir a la gran pradera, visitando primero los lugares menos llamativos y coloridos para dejar así lo mejor hasta el final: la playa al atardecer. Sabía muy bien que tardaría días, quizá semanas, pero ella no tenía dueño y hacía bastante tiempo que no veía a la mía, así que ¿por qué no? -Tardaremos bastante en recorrer todo el club- advertí. Como siempre, el sendero de regreso se me hizo mucho más corto al andar que el tiempo que habíamos empleado al avanzar hacia adelante, pero poca atención le presté a aquel detalle. Estaba más ocupado, y agradecía el estarlo para no tener que pensar en otras cosas que no quería ni recordar.

Dí media vuelta junto a él, siguiéndolo desde atrás, con paso tranquilo pero entusiasta. Ante su pregunta, negué con la cabeza, resoplando luego. - ¡Claro qué no lo sé! -gemí, mientras negaba nuevamente con la cabeza, acelerando un poco el ritmo para no quedarme demasiado detrás. Iba atenta, observando constantemente el camino ya que contaba con que el semental se separaría de mí en cuanto tuviese oportunidad, y en caso de que tuviese ganas de volver no acudiría a él. No porque no quisiera, claramente, sino porque no iba conmigo el ir prácticamente mendigando que me llevaran a tal o tal lugar. Sus palabras me sacaron del hilo de mis pensamientos, esbozando una sonrisa torcida- no tengo ningún evento importante, así que podemos tardar todo el tiempo del mundo -aseguré, con un tono firme pero dulce a la vez, siguiendo al semental de cerca, preguntándome aún a donde iríamos.

*El cielo se comienza a nublar y empiezan a caer pequeños y blancos copos de nieve, que inundan en lugar cubriendolo de un manto blanca de nieve *

Llegamos al bosque y nos pusimos a andar por el camino nevado.Era una sensación maravillosa sentir la nieve debajo de las patas después de haber estado tanto tiempo sin moverse.

Respiré hondo, casi había olvidado lo que era esa sensación de libertad al montar.
Un camino largo y recto se encontraba frente a nosotros.- ¿ que tal una galopada? -sonrei

Tan pronto la escuché,salí al galope por el camino.Empecé a alargar el galope más y más.Llevaba tanto tiempo sin galopar al máximo por el monte...

Era una experiencia realmente impresionante, casi podíamos volar. Tenía un galope rápido pero suave, no podía parar de sonreír.
Cuando acabo la recta lo frene poco a poco para no resbalar con la nieve.

Noté un pequeño tirón del bocado y fui frenando el galope hasta ponerme al trote corto.
Que bien me he quedado Pensé.

Habia sido realmente increbile, uego al paso fuimos a la psita de doma

seguí a galope tendido debía pasar rapido para que nadie viera que me había escapado de los boxes,en un momento perdí de vista a winter que yo suponía me estaba siguiendo ya que nos escapariamos, habiamos estado mucho tiempo encerrados en los boxes.en fin segui galopando salté con facilidad lo que quiza sería la valla de un prado.me detuve bruscamente,había un camino en frente de mi,un bosque frondoso,nunca lo había recorrido,de por si yo era muy curiosa a si que entre en el bosque a trote ligero.luego giré la cabeza para ver si winter o algun otro caballo venía,espere unos segundos,tenía en la mente que si nadie venía debía ir sola,pero esperé a ver que pasaba.

Pero... que rayos estaba haciendo?ingresando en un bosque?,sin que nadie supiera que allì estarìa sin conocer el lugar?,era mi instinto me impedìa seguir aun mas cuando escuche ruidos de tras de los arbustos..sin embargo mi curiosidad era fuerte,en fin me concentrè en el ruido,los caballos somos animales de huida fue instintivo....sali a galope tendido en direccion contrarÍA hacia el bosque..estaba a pocos metros de los prados de la hipica,di un salto supongo que salte aproximadamente 1 metro,era la valla que separaba el prado del bosque allì,en el prado ne sebtìa calma,buscaba la compañia de algùn caballo ..