La playa

Observé a lo lejos a Marismeño y a Tormenta. Sonreí pícaramente.
-Que va, muchas parejitas ultimamente- Dije para mis adentros.

-Sii, es verdaad..-dije provocándome escalofríos hasta que pasados unos minutos nos acostumbramos a la temperatura.

-Jajaja yo también, da gusto estar contigo.-dije con una sonrisa, mirándolo dulcemente y siguiéndole hasta lo más hondo.-La verdad, no se conocen muchos caballos como tú.-añadí mientras, por milésima vez, me perdía en su mirada.

Me reí al escuchar sus últimas palabras.

- ¿Eso debo tomarmelo como algo bueno? -pregunté, moviendo mi cola de forma pícara- ¿cómo soy yo? -insistí, riéndome un poco más. Lo que esperaba era que no me saltara con nada malo, ya la frase se podía interpretar de muchas maneras.

Me reí al oírle y lo miré con una mirada pícara.

-¡Pues claro que te lo tienes que tomar como algo bueno!-dije entre risas.-Eres...-dije pensativa, buscando las palabras que pudieran describirle correctamente.-Eres un gran caballo,-opté por decir, al no encontrar en ese momento adjetivos para describirle.-simplemente, eres perfecto.-añadí con una voz dulce pero a la vez, muy bajita ya que no quería que se oyese mucho.

Si hubiera podido, estaba seguro de que acabaría sonrojandome.

Opté por reírme un poco y bajar la mirada, escondiéndome detrás de mis crines. - Esto... Si hablamos de perfección creo que no soy el mejor ejemplo, siendo que otros u otras la representan en todo el sentido de la palabra -dije lentamente, esbozando una dulce y amable sonrisa- tú si que eres perfecta; en todo sentido, Tormenta -levanté la mirada y la observé fijamente, con ojos brillantes y expresivos.

Definitivamente, algo raro estaba pasándome.

Entre leves risas, esbocé una enorme sonrisa.

-Vaya..-dije bajando la cabeza y mirando hacia otro lado.-¿Yo? No sé, no sé...-dije volviendo a perderme en su mirada.-Dudo mucho que lo sea tanto como tú, además, eres un magnífico ejemplo de la perfección a toda regla y...gracias por el cumplido-dije algo avergonzada, pero con una enorme sonrisa y una mirada dulce y cristalina.

- Ambos lo somos -aseguré, bromeando. Estaba completamente seguro de que ella lo era, con sólo verla bastaba. Era perfecta en todo, movimientos, carácter, físicamente... Despejé esas ideas de mi mente y le salpiqué un poco de agua con mi morro- y... Cuéntame -pedí, como si se tratase de algo ocasional, sin importancia- ¿tienes pareja aquí? -pregunté, haciéndome en desentendido, olisqueando el agua.

Esquivé un poco el agua volviendo la cabeza hacia un lado, después volví a mirarle con una sonrisa. Él era absolutamete perfecto, por mucho que se negara. Sus movimientos eran maravillosos y su físico aún más y ya, ni hablar de su carácter, que era ejemplar.

-No..-dije observándole y jugueteando con la cola, salpicando un poco.-¿Ytú?-pregunté curiosa, devolviéndole la pregunta, intentando que fuera desinteresadamente.

No pude evitar ensanchar mi sonrisa al escuchar el "no". Me sentiría un tanto mal si teniendo pareja yo... la mirara de aquella manera. Estaba claro que de mi parte al menos había un interés mayor. - No, no. Tampoco -contesté, ladeando mi cabeza y observándola fijamente. Suspiré, no retiré la mirada puesto que el quedarme embobado observándola era ya un hecho.

Al oír el "no" una sonrisa se esbozó en mi cara, pero intenté ocultarla un poco, volviendo la mirada hacia él. De nuevo volví la mirada hacia el horizonte, el sol ya casi se había ocultado y el agua seguía fría. Moví la cola juguetona y me sacudí el agua fría que goteaba por mis crines. Tras esto, volví a mirar a Maris, volviéndo a quedarme totalmente fascinada por su belleza, aunque no quería que se notara mucho, cada vez que lo hacía me costaba más volver a la realidad y en ese momento, no quise regresar...

Mi cuerpo se movió instintivamente, acercándome unos pasos hacia ella. Luego, finalmente me di cuenta de que iba a hacer una tontería, por lo que busqué una salida fácil o un tema para sacar. - Ehh... Esto... ¿Vamos saliendo ya? El agua se está enfriando -propuse con nerviosísmo.

no podía dejar de reírme.
-Seras retorcida- le dije bromeando y riendo a Caria mientras la cojia en brazos y la volvia a meter denro del agua.Luego mire a Cybele y reí al verla meterse.
Comencé a salpicarles riendo

- Jajaja - Me reí contenta , - Ya lo sé , soy muy retorcida - Dije bromeando . Sonreí a mi preciosa yegua que se había metido en el agua junto a nosotros y al igual que ellos empecé a salpicar riendo .

Me reí y luego de un rato salí del agua. El agua chorreaba de mi cuerpo, crines y cola, por lo que me sacudí un poco y me tumbé debajo de la palmera, para que me brindara sombra.
Me levanté y me dirigí hacia la gran pradera

No pasaba de sonrei y luego sali del agua.
-Que bien sienta un buen baño -dije mirandola sonriendo

Sonreí - Cierto ... - Dije asintiendo con mi cabeza . Salí junto a él y en la arena exprimí mi camisa - Ufff - Dije pensando mientras me miraba toda mojada . Le sonreí y me senté en la arena .

Solté a Luna cuando llegamos, antes le ofrecí unas golosinas, al igual que a Hick. Ajusté la cincha, acomodé los estribos y acaricié a mi precioso caballo. Había puesto la cabezada nueva, la que no llevaba bocado.
- ¿Te resulta cómoda? -preunté, mirando que tal le quedaba- vamos a como va -aseguré, subiéndome a su lomo- ¿te gusta este lugar, bonito?

Luna :

Al llegar mire todo el mar y le volvi a tocar el hombro a la chica en forma de agradecerle , cuando me solto me puse a trotar en direccion al mar y me puse a jugar con las olas pensando que asi iva a poder olvidar lo susedido

Comí la golosina con gusto, el hecho de no llevar bocado me facilitó el hacerlo. La sabore con gusto, alegre. Observé la playa, era un lugar enorme, como una pista gigante. Sin embargo allí no había ninguna cerca ni nada que nos detuviera. Sonreí un poco más, moviendo mi cola con entusiasmo. Al escuchar la pregunta de Katy asentí con la cabeza. Ciertamente reaccionaba mucho mejor a la voz, el asiento y las ayudas que a el bocado, ya que al ser tan flojo de boca realmente me incomodaba. Le agradecí por eso, mientras pensaba para mis adentros que aquél era el lugar ideal para mí. Esperé pacientemente a que subiera, y en cuanto lo hizo comencé a trotar, acercándome a la orilla y trotando por ahí, viendo como mis patas eran cubiertas por el agua. "¡Hola!" saludé a la yegua negra, sonriéndole.

"¡Me encanta" respondí a Katy, moviéndome suave y prolijamente, tratando de llevar un trote cómodo para ella.

Seguí sus movimientos, cómoda, hasta acercarnos al agua y a Luna.

Luna :

Observe al caballo - hola! - salude alegremente - como te llamas? - dije con un poco de curiosidad sientiendo el agua en mis patas y en la punta de mi cola

Me adentré un poco más en el agua, acercándome a Luna con una sonrisa. "Me llamo Hickstead; puedes decirme Hick si te resulta más cómodo" hice una pausa mientras observaba el cielo, paseando mi mirada entre éste y el agua.

"¿Tú, cómo te llamas?" pregunté con cierta curiosidad, amablemente.

Luna :

Un gusto Hick! - dije alegre - yo soy Luna Negra pero me puedes llamas Luna - dije mirando el mar - as venido antes a una playa? - dije con curiosidad

"Encantado" respondí. A su pregunta negué con mi cabeza, de forma animada.

"No... Realmente salía pocas veces de paseo" comenté con cierta gracia, riéndome un poco. Luego observé a Luna con una sonrisa. "Supongo que tú si has venido antes" deduje, mientras con mi pata delantera movía un poco el agua.

Luna :

Si...pero antes de llegar a este club tambien me sacaban muy poco , de donde yo vengo mis padres eran los mejores en lo que hacian y bueno de mi esperaban lo mismo - dije entre unas risas - aca uno es mas libre - dije viendo unas olas llegar